La posición de los cuerpos celestes incide en los seres vivientes de maneras mucho más tangibles que la astrología. La posición de la Tierra con respecto al sol determina las estaciones y, con eso, el clima y las precipitaciones. Y la de la luna, el movimiento de los líquidos en la Tierra: desde los mares hasta el interior del cuerpo humano.
Entonces, si se quiere lograr un cultivo óptimo, no extraña que haya que tener en cuenta el comportamiento de éstos. Hay momentos ideales para plantar, para cosechar y muchos factores a tener en cuenta para aprovechar el potencial de la planta teniendo en cuenta el estado del cielo.
“La savia es la sangre de la planta y, dependiendo de dónde esté la luna, es en qué parte de la planta se concentra. Y ese será el lugar para trabajar”, explica Sister Chel, la reconocida cultivadora de Sisters of the Valley (a.k.a. las monjas que cultivan marihuana).
A la hora de pensar sus cultivos, siempre tiene en cuenta las fases lunares. “Estaría padre que la gente vuelva a descubrir este conocimiento del que nos hemos ido despegando poco a poco. Los mayas lo usaban para cultivar todos sus alimentos”, explica, desde el Valle Californiano, muy cerca de México.
Chel comenzó a implementar este conocimiento hace aproximadamente un año. Y asegura que ve una notoria diferencia en sus cosechas: “Sí funciona. Si lo aplicas al pie de la letra, tienes un cultivo muy bonito”.
El calendario lunar
El calendario lunar varía según el hemisferio, porque la fase lunar se relaciona directamente con la posición de un punto terrestre determinado en relación a la luna.
De hecho, su cercanía y su luz influyen en el movimiento de los fluidos dentro de las plantas.
Se considera que durante la luna nueva es el momento ideal para realizar podas en la planta de marihuana, al igual que lo que se recomienda para el cabello humano. ¿Por qué? Porque el crecimiento de la planta es más lento y la savia se encuentra más concentrada en las raíces que en tallos y hojas.
“Cuando la luna está nueva, es el momento ideal para trabajar en todo lo que sea raíces y la tierra. Para abonarla o agregarle vitaminas”.
Además, Sister Chel también elige esta fase lunar para cosechar. “Porque toda el agua y todos los químicos que puede tener la planta y todos los metales pesados, están abajo. Esto le daría un sabor mucho mejor a las flores y, a su vez, haría el proceso de secado mucho más fácil”.
Para ella es importante aprehender este conocimiento más allá del cannabis. La luna nueva, dice, es ideal para sembrar o cultivar esas cosas que crecen hacia abajo: los tubérculos, por ejemplo.
Por otro lado, con la luna en cuarto creciente comienza la etapa de fuerte crecimiento que culminará en la luna llena. En esta fase, la mayor concentración de savia se moverá de las raíces hacia tallos y ramas. Buen momento para iniciar la germinación.
Asimismo, con la luna llena, la savia sube y se encuentra concentrada en el follaje. “Este no sería un buen momento para cortar la planta”, explica Sister Chel.
Por el contrario, es el mejor momento para el sembrado, ya que pretendemos que la planta crezca hacia arriba todo lo posible.
Por último, para hacer esquejes, la hermana considera que el mejor momento es aproximadamente tres días adentrada la fase menguante. “Ya que la savia está ahí, ni del todo arriba ni del todo abajo. Y lo que quieres es que tus esquejes estén llenos de savia, pero sin hacer sangrar a la planta”.